Las madres de un colegio valenciano se desnudan por el transporte escolar

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¿Y no sería mejor que estas madres soliciten o desarrollen una experiencia de Caminos Escolares Seguros, para que sus hijos lleguen perfectamente a su colegio?

Personalmente apoyo las reivindicaciones de estas mujeres, independientemente de que el método utilizado no me parece el más adecuado por el contexto escolar en que se produce, pero apoyo a las madres del colegio Evaristo Calatayud de Montserrat de Valencia en sus acciones de protesta por los recortes sufridos en educación, pues supone la supresión del servicio de transporte colectivo para los niños y niñas de esa población.
Sin embargo, el trayecto de 3-6 kilómetros que describen, es una distancia ideal para que con monitores especializados, con las propias madres o padres y un debido acompañamiento de la policía local, realizar el transporte en BiciBús, que consiste en reunir a los primeros alumnos en el punto más distante y después ir recogiendo a los demás en "paradas" intermedias.
Existe diversos tipos de bicicletas para llevar incluso a los más pequeños o a los que no saben todavía pedalear y clases especiales para que estos aprendan a montar y a desenvolverse. Por último recordar que, en otros países es habitual que los niños sean autónomos para ir al colegio ¿por qué nosotros no podemos hacerlo?.
Desde hace unos años, ConBici, así como otras entidades como el CENEAM o la DGT, trabajan en la conveniencia de que los niños, desde bien pequeños, acudan a sus clases a pie o en bicicleta, pues eso les aporta autonomía y sobre todo salud, dados los graves problemas que están acarreando los altos índices de obesidad. Acudir al colegio aprovechando el trayecto para hacer ejercicio es una opción más que deseable y por las circunstancias que ahora está tocando padecer debido a los consabidos recortes, les invitamos a conocer estos proyectos perfectamente diseñados para conseguir niños y niñas más sanos, autónomos y socializados, por las compañías que van haciendo por el camino a sus escuelas. Además su rendimiento de ha demostrado mayor cuando llegan por sus medios que cuando llegan pasivamente subidos en un coche o autobús.

A falta de conocer el caso más a fondo, si les proponemos a las niñas y niños ir al colé al cole en bici con el resto de compañeros, seguro que estarían encantados… ya solo falta convencer a los padres y madres de que a sus hijos les puede convenir otro tipo de movilidad que les haga abandonar el sedentario estilo de vida que les imponemos.

Manuel Martín